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viernes, 1 de noviembre de 2019
PANDEMONIUM: La capital del Infierno
Según El paraíso perdido de John Milton, un poema épico publicado en 1667 y la obra más reconocida de uno de los más destacados poetas ingleses de ese siglo, es el nombre que recibe nada menos que la capital del Infierno. Inspirada en las descripciones bíblicas y los sucesos que aparecen en el Génesis, esta escrita, según Milton, para “justificar las maneras de Dios hacia los hombres”, quien la presenta como una ciudad regida por Satanás y sus ángeles caídos, erigida por el arquitecto Mulciber, otrora creador de palacios en el Cielo. Fue Mammon, una figura que representa la avaricia y la excesiva abundancia, quien sugiere a Su Majestad Infernal crear la ciudad desde la cual pueda gobernar al mundo. Se dice que fue construida en una hora y como no se ajustaba al tamaño de los demonios - quienes son de gran tamaño sin contar sus alas - por lo que estas diabólicas criaturas tuvieron que disminuir su figura para poder caber en ella. Aunque sobrepasa en tamaño a cualquier palacio o lugar habitado por los humanos. Como en toda ciudad de tamaña magnitud, es fácil imaginar que existan en ella templos y palacios monumentales, rodeados de una gran muralla de descomunales dimensiones y completamente inexpugnable, aunque la atención de su población está centrada en la corte infernal, que se reúne siempre en un gran salón del Palacio Infernal con el imponente Trono de Satanás que domina el escenario y desde el cual el Diablo ordena a sus huestes demoníacas. Cabe destacar que sus nueve puertas - tres de bronce, tres de hierro y tres de la roca diamantina protegidas por el pecado, la muerte y los perros del infierno - definen los límites de la ciudad, que está separada del Cielo “por un gran abismo”. A propósito y ya que hablamos del Infierno, cabe preguntarse donde se encuentra ubicada. En la Edad Media, la gente pensaba que el infierno era subterráneo y había leyendas de viajeros que aseguraban haber visto humo a través de agujeros del suelo. Dante estaba de acuerdo y, como suponía que la Tierra era redonda, ubicaba a Satanás en el fondo del infierno, con su cintura en el centro de gravedad de la Tierra. El infierno de Milton, sin embargo, está lejos de la Tierra. El paraíso perdido está situado en los tiempos de Adán y Eva cuando la Tierra todavía era perfecta, por lo que sería incongruente que el Infierno estuviera en el centro de la misma. Dante se las arregla para hacer todo el recorrido por el Infierno, el Purgatorio y el Cielo en menos de una semana. Mientras que el Satanás de Milton necesita nueve días sólo para caer del Cielo al Infierno. La verdad es que esta puede ser bastante sofocante, especialmente como lo describe Milton, rodeada de montañas, cuevas, playas y pantanos de fuego. En el Antiguo Testamento, la palabra traducida "infierno" es Seól; en el Nuevo Testamento, es Hades (que significa "invisible") y Gehena ("el valle de Hinom"). Seól también se traduce como "pozo" y "sepulcro". Tanto Seól y Hades se refieren a una residencia temporal de los muertos antes del juicio (Salmo 9:17; Apocalipsis 1:18). Gehena se refiere a un estado eterno de castigo para los muertos impíos (Marcos 9:43). La idea de que el infierno está debajo de nosotros, tal vez en el centro de la tierra, viene de pasajes tales como Lucas 10:15: "Y tú, Capernaum, que hasta los cielos eres levantada, hasta el Hades serás abatida." También, en 1 Samuel 28:13-15, el médium de Endor ve el espíritu de Samuel "subiendo de la tierra". Debemos señalar, sin embargo, que ninguno de estos pasajes se refiere a la ubicación geográfica del infierno. Capernaum siendo abatida "hacia abajo" es probablemente una referencia a ser condenado en vez de una dirección física. Y la visión del médium de Samuel era sólo eso: una visión. En la versión King James, Efesios 4:9 dice que antes de que Jesús ascendió al cielo, "también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra." Algunos cristianos toman "las partes más bajas de la tierra" como una referencia al infierno, donde dicen que Jesús pasó el tiempo entre su muerte y resurrección. La noción de que el infierno está en algún lugar en el espacio exterior, posiblemente en un agujero negro, se basa en el conocimiento de que los agujeros negros son lugares de gran calor y presión de los cuales nada, ni siquiera la luz, puede escapar. Otra especulación es que la tierra será el "lago de fuego", mencionado en Apocalipsis 20:10-15. Cuando la tierra es destruida por fuego (2 Pedro 3:10; Apocalipsis 21:1), según esta teoría, Dios usará esa esfera ardiente como el lugar de tormento eterno para los impíos. Nuevamente, esto es mera especulación. Para resumir, no podemos localizar su ubicación exacta. Literalmente, el Infierno es un lugar literal de verdadero tormento, pero no sabemos dónde se encuentra. El infierno puede tener una localización física en este universo, o puede estar en una "dimensión" totalmente diferente. En cualquier caso, su ubicación es mucho menos importante que la necesidad de evitar ir allí.
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