Una noticia proveniente de la lejana Georgia da cuenta que el presidente de dicho país caucásico, Mijaíl Saakashvili, se ha mostrado indignado por la decisión de restaurar un monumento a José Stalin, anunciada la víspera por las autoridades de Gori, ciudad natal del mayor asesino de la historia.«La restauración del monumento a Stalin (retirado en 2010 tal como se aprecia en el vídeo adjunto) en el siglo XXI es un acto bárbaro y antigeorgiano», declaró Saakashvili tras reunirse con el ex primer ministro polaco Jaroslaw Kaczynski. Saakashvili agregó que dicho acto «llevaría a un aislamiento internacional de Georgia», y recordó que a petición de Stalin el ejército soviético invadió Georgia (en febrero de 1921) y puso fin a su independencia. «Fue Stalin quien quitó tierras a Georgia y las regaló a otras repúblicas soviéticas (...) Fue Stalin quien colocó minas de acción retardada en Abjasia y la llamada Osetia del Sur», dijo Saakashvili en referencia a las dos repúblicas separatistas georgianas. «Llamo al primer ministro de Georgia (Bidzina Ivanishvili, opositor al presidente), quien toma decisiones en el Gobierno, a que revise esta decisión estúpida de la que Georgia no sacará provecho», agregó Saakashvili. Según las agencias locales, la decisión de recuperar el monumento al «padre de los pueblos» fue tomada hace varios meses por el ejecutivo, mientras que las autoridades de Gori anunciaron la víspera que la obra de bronce de seis metros de altura volverá a ser erigida en la casa-museo de Stalin antes de que termine el año. El anterior Parlamento georgiano ratificó en junio de 2010 un documento que dispone demoler los monumentos y símbolos soviéticos, oprobiosos recuerdos de la ocupación soviética que mantiene abiertas muchas heridas A pesar e que muchos han sido dinamitados, en Georgia aún quedan monumentos al maldito criminal, para mayor escarnio, oriundo de esa república. Es por ello menester redoblar esfuerzos y eliminar cualquier vestigio que recuerde a sus odiados verdugos.
