EL CASTILLO DE PRAGA: Pompa y solemnidad en una majestuosa edificación

Ubicada en la capital de Bohemia y la República Checa, el monumental Castillo de Praga es el mayor conjunto arquitectónico con castillo del mundo, y es el principal atractivo de la ciudad. Construido en el año 880, con el paso de los siglos, innumerables reyes han habitado en este conjunto de palacios e iglesias. En la actualidad es sede del gobierno checo. En realidad, el Castillo es una pequeña ciudad: los muros del conjunto arquitectónico albergan varias calles y 3 patios. La construcción de esta colección de palacios tardó 13 siglos en construirse. En conjunto, el Castillo de Praga abarca un área del tamaño de 7 campos de fútbol y puede pasarse tranquilamente un día entero recorriéndolo. Uno de los monumentos más impactantes del interior de las murallas del castillo es la Catedral de San Vito. Las altas y esbeltas torres, que se pueden ver a kilómetros de distancia, son un gran ejemplo de la arquitectura gótica. Hubieron de pasar 600 años para construir la catedral: la nave central se finalizó en 1929. Inaugurada en el 921, la Basílica de San Jorge se encuentra en la plaza que se encuentra detrás de la Catedral de San Vito. El Monasterio de San Jorge, junto a la Basílica, fue el primer monasterio benedictino de la región checa de Bohemia. La iglesia fue parcialmente destruida por el fuego en varias ocasiones, y por ello, presenta una mezcla de estilos arquitectónicos. Cabe destacar que el antiguo palacio real es una de las secciones más antiguas del Castillo de Praga. Originalmente, el palacio se construyó en madera, pero en 1142 la construcción fue sustituida por una estructura de piedra. La Vladislavsky sal, la sala gótica, es la parte más interesante del palacio. Se finalizó en 1502 y durante muchos siglos sirvió como el escenario para la coronación de reyes y reinas. Con un tamaño de 62 x 16 metros, se trata de la Sala de los Caballeros de mayor tamaño de Europa. Le será fácil imaginar a los reyes bajando las escaleras sobre un caballo y dirigiéndose a la sala, nada inusual hace varios siglos. Es mas, la tradición continúa en pleno siglo XXI, ya que la elección del presidente de la República Checa se sigue celebrando aquí. Las mazmorras góticas que se encuentran bajo el palacio acogen una exposición de la historia de este bello edificio. Asimismo, detalladas maquetas ilustran las fases de desarrollo del palacio. Por su parte, los jardines, praderas, parterres y fuentes que rodean el Castillo de Praga son una alegría visual. No solo por su belleza, también por las grandes vistas del castillo. Encontrará varios jardines, cada uno diferente: Los Jardines reales, los Jardines del sur y el Jardín en la Muralla. Los Jardines reales, al nordeste del palacio real, ofrecen bellas vistas de Praga y del Moldava. A diferencia del abarrotado Castillo de Praga, los jardines son un remanso de paz y tranquilidad. Durante la Segunda Guerra Mundial fue sede del Protectorado nazi y sufrió graves daños cuando fue bombardeado por los rusos al atacar Praga. Es notable cómo el castillo logró sobrevivir a tan agitada historia y con el tiempo llegar a convertirse en todo un símbolo y leyenda viviente de la ciudad.