Se trata de la mayor exposición que se realizará en noviembre en el Museo Británico, y se producirá luego de que se rechazara una oferta para adquirirlas al arqueólogo alemán Heinrich Schliemann hace casi 150 años, por lo que terminaron en Berlín.
En una conferencia de prensa, la co-curadora de la muestra Desleí Fitton dijo que el Museo Británico finalmente busca compensar esta pérdida, con una ambiciosa exposición que tratará sobre las excavaciones realizadas por Schliemann en Troya, ubicada en la actual Turquía, al sur de Constantinopla (Estambul). Según la mitología griega, registrado en la Ilíada de Homero, este fue el lugar donde se libro una larga e infructuosa guerra contra los troyanos por parte de los griegos, los cuales solo mediante una artimaña pudieron llegar a tomar y destruir la ciudad. La muestra - que consta de 300 piezas - no solo presentará los hallazgos arqueológicos realizados en Troya, excavados principalmente entre 1870-90, sino que también examinará cómo se ha interpretado el mito homérico en los últimos siglos y en nuestros tiempos. Junto con 100 valiosos objetos procedentes del Pergamon Museum de Berlín, habrá 200 más de la propia colección del Museo Británico y otras fuentes, incluyendo el Museo Ashmolean de Oxford y el Museo Nacional de Dinamarca, en Copenhague. Como sabéis, Schliemann originalmente quería que sus hallazgos terminaran en el Reino Unido y se acercó al Museo Británico en la década de 1870, ofreciendo venderles toda su colección, incluyendo el famoso Tesoro de Priamo (Priam's Treasure), por £ 50,000 de ese entonces (aproximadamente £ 5m al día de hoy). Pero tanto los fideicomisarios del museo como el Primer Ministro consideraron que era demasiado caro. La siguiente oferta que les hizo para interesarlos fue un préstamo. Sin embargo, como por esos tiempos el Museo Británico rara vez montaba exposiciones temporales, no aceptó su propuesta. Entonces Schliemann se lo ofreció al South Kensington Museum (hoy el Victoria and Albert Museum) en 1877, que exhibió la colección durante tres años. Al ver frustrados sus deseos, Schliemann decidió donarlo en 1880 al Pergamon Museum de Berlin, donde fueron exhibidos desde entonces. Sin embargo, en 1945 parte de la colección cambio de manos cuando a finales de la II Guerra Mundial, los invasores rusos tomaron Berlín y saquearon la capital del III Reich, llevándose entre la multitud de objetos robados, el Tesoro de Priamo, tan famoso como el Oro de Tutankhamon, que termino en Moscú. Ahora se encuentra en el Museo Pushkin considerado como ‘botín de guerra’ y Rusia ha rechazado numerosas solicitudes alemanas para devolverlos. Por lo tanto, la exposición en el Museo Británico no podrá contar con dichos tesoros. Teniendo en cuenta además el tenso estado de las relaciones culturales germano-rusas sobre las restituciones, no se ha solicitado ningún préstamo al Pushkin. Entre las obras que se exhibirán en la exposición, destaca un ánfora de figuras negras atenienses que data de 530 a. C., que muestra a Aquiles matando a Penthesilea - la reina de las Amazonas - en el momento en que se enamora de ella. Otra será una exquisita copa de plata romana, datada en el siglo I d.C. y encontrada en una antiquísima tumba en Dinamarca, que muestra el momento en que el rey Priamo besa las manos de Aquiles, que acababa de matar a su hijo Héctor. Otro objeto que llama poderosamente la atención, es la tapa de un sarcófago romano con un caballo de madera con ruedas - procedente del Museo Ashmolean - que representa al famoso Caballo de Troya, cuyas representaciones son bastante raras en el arte antiguo, el cual lleva un casco y esconde a unos guerreros griegos en su interior. Un préstamo llamativo para la exposición es la escultura de mármol de Filippo Albacini (1777 1858), titulada La muerte de Aquiles, cedida por Chatsworth House. Al ser el mas conocido de los guerreros griegos, era también un despiadado asesino y que murió a manos del príncipe Paris durante la caída de la ciudad al introducirse una flecha en el talón, la única parte de su cuerpo que no había sido protegida por los dioses. De esta manera, la exposición cruzará la línea entre el mito y la realidad que ha fascinado desde los antiguos griegos y romanos hasta nuestros días. Gracias de Schliemann, Troya sigue presente, sobre todo porque ofrece la esperanza de descubrir la verdad histórica detrás del mito antiguo, como lo demuestran las muchas y emocionantes reinvenciones contemporáneas realizadas luego de milenios de ocurrido, demostrando que la historia de Troya no ha perdido ninguna relevancia. Esta exposición - que estará abierta desde el 21 de noviembre del 2019 hasta el 8 de marzo del 2020 - permitirá a los visitantes conocer a los personajes, sumergirse en la arqueología de Troya y descubrir el mito y la realidad de Troya por sí mismos.