SONIDOS DEL MUNDO

viernes, 28 de marzo de 2025

CIUDADES PERDIDAS: Petra

Escondida en el corazón de Jordania, esculpida en las paredes de una zona de acantilados de piedra arenisca de tonalidades rosadas y rojizas, se encuentra la ciudad de Petra, también conocida como la "ciudad rosa", una zona arqueológica de gran interés cultural e histórico. Capital del reino nabateo, donde soberanos y mercaderes desarrollaron una arquitectura espectacular que ha robado el corazón de viajeros de todo el mundo, así como de todos aquellos expertos en el estudio de la historia humana. Poco queda de lo que esta ciudad milenaria llegó a ser un día: una serie de tres grandes terremotos arrasaron con gran parte de sus estructuras, y lo que vemos en la actualidad, por impresionante que sea, corresponde en gran parte a las tumbas construidas por sus habitantes más adinerados en la propia roca, lo que posibilito su conservación. No obstante, Petra fue una ciudad próspera y, entre sus ruinas, los arqueólogos tienen una infinidad de sorpresas por descubrir. La vida en la ciudad de Petra, antes de que el inexorable paso del tiempo y las catástrofes hicieran mella en sus estructuras, era bulliciosa y su estilo de vida, en muchos casos, opulento. La antigua capital del reino nabateo creció gracias a las rutas de comercio caravanero que confluían en ella por su posición privilegiada, y desde donde se distribuían los productos hacia otros territorios de África y Oriente Medio. Por allí llegaba seda, betún, incienso, especias o mirra, entre otras mercancías, sobre las cuales los nabateos cobraban un 25 o hasta un 50 por ciento de tributos. Así se construyeron palacios, negocios, templos, talleres y los espacios públicos y privados que dotaban la ciudad de vida y actividad. Al menos, así fue entre los siglos IV a.C. y II d.C., aproximadamente, aunque no se dispone de datos suficientes para poder establecer una cronología exacta de este reino. Los orígenes de la ciudad, sin embargo, se remontan hasta el 9000 a.C., que según los indicios fue su ocupación más temprana. Pero la gloria no dura para siempre, y Petra no es una excepción. Cuando Roma se anexionó los dominios nabateos durante la época del emperador Trajano, la importancia política de Petra fue en declive, a la vez que surgieron nuevas rutas comerciales que obviaban este destino. Así languidecía, cuando terminó por desaparecer como ciudad cuando fue ocupada por los musulmanes en el siglo VII, y abandonada, cayendo en el olvido, hasta que la mítica ciudad fue redescubierta en el año 1812 por el explorador suizo Johann Ludwig Burckhardt, un aventurero que recorría el desierto de Siria junto a sus guías beduinos. Entre altos acantilados, recorriendo el fondo de un torrente o wadi, encontró la entrada al valle de Moisés (wadi Musa), y quedó asombrado ante la majestuosidad de los monumentos tallados en la roca. Para Occidente, la ubicación de Petra había permanecido oculta durante siglos, y sólo desde su redescubrimiento se volvió a hablar de este lugar mágico y rodeado de leyendas que lo relacionaban con un gran tesoro, o el palacio de la hija de un faraón. Desde entonces, Petra se convirtió en uno de los sitios arqueológicos más relevantes, y con el auge del turismo también en un destino muy visitados por el público en general. A pesar de su aspecto único, el estilo de las tumbas que perduraron en Petra estaba extendido en todo el Oriente helenístico, y por tanto no es una invención nabatea. Esta arquitectura presenta influencias orientales, asirios, persas y egipcios, así como también helenísticas y romanas. Al respecto, el Tesoro de Petra, conocido como "Al-Khazneh", es uno de los monumentos más emblemáticos de esta ciudad considerada una de las siete maravillas del mundo moderno. Este majestuoso edificio, de aproximadamente 40 metros de altura, fue tallado en la roca rosada y se cree que sirvió como tumba real o templo. Cabe precisar que tan sólo el 20% de la ciudad es actualmente visitable, aunque las excavaciones continúan desenterrando edificios. Y al contrario de lo que muchos creen, la ciudad de Petra no fue construida en piedra sino excavada y esculpida en la roca, formando un conjunto monumental único que le valió para ser incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad en 1985. Y es que los trabajos debieron ser muy arduos, ya que en esta ciudad llegaron a vivir más de 30.000 personas. Aunque fue ampliada durante su época de mayor esplendor, se cree que Petra nació para los nabateos como una ciudad funeraria, ya que ellos mismos la bautizaron como “la ciudad para el día de mañana”. Al principio de los tiempos, según algunos expertos, los habitantes de Petra vivían en jaimas -tiendas - ya que los edificios excavados en piedra son, en su mayoría, tumbas del siglo III a.C, que varían en tamaño, diseño y ornamentación en función de la posición social del fallecido. Pero a partir del siglo IV a.C Petra floreció como ciudad comercial gracias a su ubicación en la confluencia de hasta siete rutas comerciales entre Oriente y Occidente, entre Arabia y el Mediterráneo. Tras el establecimiento en Petra del pueblo nabateo, se convirtió en una ciudad próspera y rica gracias al pillaje durante los primeros años y, más tarde, a los altos peajes que cobraban por la seguridad de sus muros. Y es que Petra se ubica entre altas montañas rocosas y sus habitantes se encargaron de construir complejas redes de canales que les abastecían de agua potable, lo que hacía de ella un enclave muy atractivo en el que descansar., tras una larga travesía y fatigosa por el desierto. Uno de los hallazgos más sorprendentes cuando se visita esta maravilla es el teatro, una virguería arquitectónica excavada en la roca. Al principio se creía que esta construcción del siglo I era de origen romano, pero lo que hicieron estos fue remodelar y perfeccionar lo que los nabateos ya habían construido. Lo más sorprendente son sus gradas, perfectamente talladas en la falda de la montaña y donde se calcula que se juntaban 5.000 espectadores. Por cierto, el cañón que la protege y la mantuvo oculta durante siglos también conserva alguna sorpresa. Entre ellas, algunos relieves y esculturas que atestiguan la esencia comercial de los nabateos. En estas creaciones se distinguen mercaderes, camellos y diferentes objetos que demuestran que Petra no fue una casualidad ni un hecho aislado: fue la máxima expresión de una sociedad culta y cosmopolita. En la ciudad de Petra, además de El Monasterio y El Tesoro, no hay que olvidar visitar el Altar de los Sacrificios que se encuentra en la cima de una montaña, dominando la ciudad. Lugar de culto para los nabateos, este altar está formado por dos obeliscos de 6 metros de altura, un altar circular y un tridinio, donde se cree que los participantes en el sacrificio a los dioses compartían la cena. En cuanto a la religión nabatea, eran politeístas por lo que adoraban a un gran número de dioses, algunos propios y otros grecorromanos como Tique o Dioniso. El principal dios nabateo era Dushara, señor de la montaña. El pueblo nabateo tuvo muy en cuenta los movimientos del sol a la hora de construir sus edificios. Así, algunos de las construcciones más importantes de la ciudad están orientadas teniendo en cuenta los equinoccios, solsticios y otros acontecimientos astronómicos. Un claro ejemplo es el famoso Monasterio, que durante el solsticio de invierno la luz del sol entra por la puerta e ilumina directamente el altar mayor, el motab. También la tumba de la Urna cuenta con un fenómeno parecido, ya que su puerta se alinea con el sol durante los equinoccios y durante los solsticios el sol señala las esquinas interiores del edificio. Petra es sin lugar a dudas una de las ciudades que debes visitar para conocer a fondo su historia y sus monumentos.

viernes, 21 de marzo de 2025

MISTERIOS DEL ANTIGUO EGIPTO: Bashiri, la enigmática momia que nadie se atreve a desenvolver

Descubierta hace más de un siglo en el Valle de los Reyes por el polémico arqueólogo británico Howard Carter, la momia Bashiri, que en árabe significa "profeta" o "alguien que puede predecir el futuro", siempre ha estado envuelta en un halo de misterio. A pesar de que muchas de las momias que han llegado hasta nuestros días han sido analizadas y estudiadas ampliamente por los expertos, sin embargo parece que en lo que respecta a la momia Bashiri parece haber cierta reticencia a desentrañar sus secretos. A diferencia de la mayoría de las momias, Bashiri, datada en el siglo III a.C. y expuesta en el Museo Egipcio de El Cairo, ha permanecido prácticamente intacta y muchos de sus secretos aún se ocultan en el interior de sus vendajes. De hecho, lo que distingue a esta momia de otras es el excepcional cuidado y la precisión con la que fue envuelta en sus finos vendajes de lino, que crean un intrincado patrón en su rostro que se asemeja a las famosas e icónicas pirámides de Giza. Básicamente, el motivo por el cual los egiptólogos se han mostrado tan reacios a realizar cualquier actuación sobre ella es que un análisis invasivo pudiera poner en riesgo a la momia y causar algún daño irreparable a su espléndido vendaje. De este modo, Bashiri es conocida entre los expertos como "la intocable", ya que los riesgos asociados a que sea desenvuelta han disuadido incluso a los egiptólogos más experimentados. A pesar de los grandes desafíos que presenta el estudio de Bashiri, su importancia es incuestionable, ya que es un magnífico ejemplo para que los investigadores puedan conocer de primera mano cómo eran las prácticas funerarias del antiguo Egipto. El extraordinario cuidado con el que fue envuelta pone de manifiesto que este individuo fue, muy probablemente, un miembro importante de la sociedad egipcia. Y es que la complejidad de los diseños de las vendas que la envuelven deja entrever el respeto con que esta persona fue tratada en vida. Pero el hecho de que los egiptólogos no se hayan atrevido a desenvolver a Bashiri no hace más que añadir un aire de misterio a esta historia, como si la propia momia se negara a revelar sus secretos y retara desde el más allá a los expertos a desentrañar su historia. Pero, gracias a los avances tecnológicos en el estudio de las momias, los investigadores han dado con una manera no invasiva para poder atisbar en su interior sin necesidad de desenvolverla físicamente. Técnicas como la tomografía computarizada de alta resolución y otros sistemas de imagen avanzados han permitido un examen exhaustivo de las vendas de lino y obtener información valiosa que de otra manera habría sido imposible. Estos métodos no invasivos han permitido a los egiptólogos mapear las intrincadas capas de los vendajes y obtener pistas sobre la identidad de esta persona, sobre su estatus social o los rituales que se habrían llevado a cabo durante el proceso de momificación, además de desvelar los diversos objetos que se colocaron entre los vendajes. Gracias a todas estas técnicas, los egiptólogos esperan poder obtener una información de incalculable valor que permita responder muy pronto a todas las cuestiones que rodean a Bashiri y que hasta ahora había sido imposible conseguir. Porque los investigadores recuerdan que a pesar del excelente estado de conservación en que se encuentra, su fragilidad nos recuerda la importancia de preservar para las generaciones futuras cualquier elemento del pasado. Bashiri es, sin duda, un magnífico testimonio de cómo se puede intentar responder a los enigmas del pasado, en este caso mediante el estudio de una antigua momia egipcia, sin comprometer su integridad. Es, en fin, un recordatorio de que, incluso ante los nuevos avances de la tecnología, hay secretos que seguramente continuarán ocultos. Y es que el misterio es, y continuará siendo, una parte integrante del encanto del antiguo Egipto.

viernes, 14 de marzo de 2025

ST. PATRICK’S DAY: Rindiendo homenaje a su herencia irlandesa

Como sabéis, este 17 de marzo se celebra en los EE.UU. y el resto del mundo el Día de San Patricio. ¿Pero quién es este santo, de donde proviene y porque esa fecha es recordada cada año? Aquí os lo contamos ¿vale? Sucede que San Patricio (siglo V) es el santo patrón de Irlanda y uno de los misioneros cristianos de mayor éxito de la historia. Se le atribuye la expansión de la alfabetización en Irlanda a través de las órdenes monásticas que estableció, la revisión y codificación de las Leyes Brehon y la conversión del país al cristianismo. La fecha de su muerte se celebra el 17 de marzo pero se desconoce el año de su muerte, al igual que su año de nacimiento. No se sabe nada de los primeros años de vida de Patrick salvo lo que menciona en su Confesión (Confessio). Escribe que nació en Bannaven de Taberniae, pero esta ubicación nunca ha sido identificada positivamente. Siendo ciudadano romano y cuando tenía dieciséis años, Patrick fue capturado por piratas y vendido como esclavo en Irlanda, donde fue vendido a un jefe local llamado Miliue de Antrim (también conocido como Miliucc), quien lo envió a cuidar los rebaños en el cercano Valle de Braid. El trabajo de estos pastores era amargamente aislado y pasaban meses seguidos solos en las colinas. Los contactos ocasionales, que normalmente se buscarían, podían traer sus propias dificultades... Como muchos otros en circunstancias imposibles, comenzó a orar. Nunca antes había prestado atención a las enseñanzas de su religión: nos dice que realmente no creía en Dios y encontraba tontos a los sacerdotes. Pero ahora no había nadie a quien recurrir excepto el Dios de sus padres. Así, la fe y la confianza de Patrick en Dios se hicieron más fuertes día a día. Escribe cómo: "El amor y el temor de Dios inflamaron cada vez más mi corazón; mi fe se ensanchó, mi espíritu aumentó, de modo que decía cien oraciones de día y casi otras tantas de noche. Me levanté antes del día en la nieve, en el hielo y en la lluvia, sin embargo, no sufrí ningún daño, ni fui afectado por la pereza, porque entonces el espíritu de Dios se calentó dentro de mí." Continuó así hasta la noche en que recibió un mensaje en un sueño donde se le ordenaba regresar a su casa. Patrick inmediatamente partió a pie hacia el mar, cruzando más de 200 millas como fugitivo hasta la costa, probablemente Wexford. Intentó reservar un pasaje en un barco mercante con destino a Gran Bretaña, pero se lo negaron. Luego cuenta cómo oró pidiendo ayuda y el capitán del barco lo llamó para que subiera a bordo. A los tres días desembarcaron en las costas de Gran Bretaña. Cuando finalmente llegó a su casa fue recibido por sus padres. Cahill escribe: "Pero Patricio ya no es un adolescente romano despreocupado. Endurecido física y psicológicamente por experiencias que no se pueden compartir, irremediablemente por detrás de sus pares en educación, no podía sentar cabeza". Aun así, permaneció en casa de sus padres hasta que otro sueño visionario le impulsó a marcharse. Patricio dejó a su familia a pesar de sus protestas y viajó a la Galia donde, luego de años de estudio, fue ordenado obispo en Auxerre. Podría haberse quedado en la Galia o regresar con su familia en Gran Bretaña, pero Patrick creía que tenía una misión para con la gente que había dejado atrás; y así regresó a Irlanda. Antes de partir, confesó a otro en Auxerre un pecado que llevaba en su conciencia desde la juventud. La naturaleza de este pecado nunca se menciona, pero su confesor más tarde lo sacó a la luz, lo que obligó a Patrick a defenderse y dio como resultado su famosa Confesión. Cuando llegó a Irlanda no fue bien recibido. Escribe cómo (probablemente en Wicklow), la gente le era tan hostil que rápidamente se trasladó al norte. Patrick conocía el idioma de los irlandeses gracias a sus años de cautiverio y, lo que es igualmente importante, conocía sus creencias. Parece haber sido un experto en compartir el mensaje cristiano de una manera que sabía que la gente entendería y recibiría mejor. Se ha escrito mucho sobre el famoso episodio en el que Patricio explica la Trinidad usando un trébol, por ejemplo, e historiadores, eruditos y teólogos han debatido si el evento realmente ocurrió. Si ese evento tuvo lugar alguna vez no es tan importante como lo que dice la historia sobre el método de Patrick para llegar a la gente. El concepto de la triple deidad, un ser sobrenatural representado en tres aspectos, era muy conocido en Irlanda. La historia de San Patricio y el trébol habría reflejado cómo San Patricio recurrió al mundo espiritual y físico que los irlandeses conocían para explicar el evangelio en términos familiares. Cabe precisar que San Patricio no fue el primer misionero en Irlanda ni Irlanda era completamente pagana cuando llegó. Paladio fue el primer misionero cristiano en Irlanda y el primer obispo. A la llegada de Patricio ya había cristianos en Irlanda y las comunidades cristianas estaban bien establecidas. Si bien Patricio no trajo el cristianismo a la isla, fue el que lo popularizó y, según la leyenda, comenzó con una floritura que se ha convertido en una de las historias más conocidas sobre él. Llegó en 432 o 433 y anunció dramáticamente la llegada del cristianismo. Se iba a celebrar el festival pagano de Ostara y el Gran Rey de Tara había decretado que no se debía encender ningún fuego en la tierra antes de que la gran hoguera en la colina de Tara iniciara la festividad. Patrick y sus seguidores subieron a la colina de Slane, justo enfrente de Tara, y encendieron su propia hoguera. Cuando el rey vio las llamas, desafiando su ordenanza, envió soldados para apagarlas y arrestar a los involucrados. Al cantar el poema ahora conocido como Coraza de San Patricio (una lorica también conocida como Faed Fiada o Grito del Ciervo), Patricio y sus seguidores pudieron pasar entre los soldados sin ser detectados, como si fueran una manada de ciervos. Llegaron a Tara, donde Patricio derrotó a los druidas en un debate y ganó el derecho de predicar en la corte del rey Laoghaire, su reina y sus jefes. En ese mismo momento aparecieron los soldados que habían sido enviados para arrestarlo, informando que no podían apagar el fuego de Patrick. La historia concluye con muchos miembros de la corte convirtiéndose al cristianismo y el rey, quien se negó, respetando a Patricio lo suficiente como para liberarlo para continuar su misión. Cahill comenta que Patrick "transmutó las virtudes paganas [del pueblo irlandés] de lealtad, coraje y generosidad en los equivalentes cristianos de fe, esperanza y caridad. Pero, aunque esta singular demostración de virtud habría hecho amigos, no necesariamente ganado adeptos, al menos no entre un pueblo tan testarudo como el irlandés”. San Patricio tuvo éxito en su misión al tocar a la gente a través de un profundo respeto y amor por ellos y por una cultura que había llegado a abrazar. Cahill escribe: Al convertirse en irlandés, Patrick unió su mundo al de ellos, su fe a su vida... Patrick encontró una manera de nadar hasta las profundidades de la psique irlandesa y calentar y transformar la imaginación irlandesa, haciéndola más humana y más noble, manteniendo al mismo tiempo es irlandés. El agua bautismal ya no sería el único signo eficaz de una nueva vida en Dios. Nueva vida estaba por todas partes en absoluta abundancia, y toda la creación de Dios era buena. Patrick fundaría comunidades cristianas en toda Irlanda, en particular la iglesia de Armagh, que se convirtió en la capital eclesiástica de las iglesias de Irlanda y donde Patrick escribiría su Confesión, codificaría las Leyes Brehon y finalmente se jubilaría. La Iglesia celta que fundó, como la del misionero Columba en Escocia luego de él, se diferenciaba en varios aspectos de la iglesia de Roma, sobre todo en la inclusión de las mujeres en la jerarquía eclesiástica, la fecha de la Pascua, la tonsura de los monjes y la liturgia. Los estudiosos están divididos sobre cuán significativas fueron realmente estas diferencias y la mayoría ahora rechaza la afirmación de que la Iglesia celta tenía una visión muy diferente a la católica romana. Sea como sea, en su estancia en Irlanda, San Patricio cambió las vidas y el futuro de las personas entre las que una vez había caminado como esclavo. Cualesquiera que sean los éxitos que hayan obtenido los misioneros anteriores como Palladius, Ailbe, Declan, Ibar y Ciaran, ninguno promovió las causas de la alfabetización, la espiritualidad y la dignidad del individuo como lo hizo Patrick. El historiador Murray Pittock cita la opinión del erudito de los siglos XIX y XX, Eoin MacNeill, de que los irlandeses "descendían de una civilización guerrera pagana que, cuando se convirtió al cristianismo, transformó Irlanda en una isla única de santidad y aprendizaje" que redefinió la sociedad celta y celta. Los monasterios que fundó o fomentó se convirtieron en centros de alfabetización y aprendizaje, en extensas universidades dedicadas al conocimiento, que con el tiempo servirían para recopilar y preservar el registro escrito de la civilización occidental luego de la caída de Roma. El Imperio Romano nunca había invadido Irlanda, por lo que la tierra no se vio relativamente afectada por su caída. En los monasterios cristianos de Irlanda se copiaron y preservaron para las generaciones futuras las grandes obras escritas del pasado. A través de su visión y misión, San Patricio cambió no sólo Irlanda, sino el mundo. Cuando los irlandeses emigraron a los EE.UU., trajeron consigo su cultura y tradiciones, entre ellas el dedicado a San Patricio que se conmemora cada 17 de marzo, convirtiéndose desde 1772 en la celebración más festiva y armoniosa en la que todos puedan sentirse orgullosos de sus raíces. Actualmente todos los estadounidenses, sean de origen irlandés o no, festejan esa fecha ataviados con ropas o maquillaje verde, o incluso llevando un trébol, la planta nacional irlandesa. Es tanta la influencia de este festejo que incluso los irlandeses en Europa y el resto del mundo también adoptaron esa forma de celebrarlo. Cabe precisar que la carne en conserva y el repollo están asociados con la festividad, y obviamente la cerveza, consumida por todos durante todo el día.

viernes, 7 de marzo de 2025

BRIGHTON ROYAL PAVILION: Extravagancia a todo nivel

Este palacio es uno de los edificios más extraordinarios del Reino Unido por su llamativa combinación de estilo asiático y majestuosidad real. Fue construido en el siglo XIX como un retiro a orillas del mar para Jorge IV, entonces aún Príncipe Regente. Comenzó como una residencia junto al mar antes de convertirse en un complejo palaciego con cúpulas, torres y minaretes inspirados en el arte y la arquitectura de la China y la India que le da un aire tan extravagante. Caber precisar que Brighton no era más que un pequeño pueblo pesquero hasta bien entrado el siglo XVIII. Hacia 1740, fue aumentando la popularidad del lugar debido a las aguas curativas de mar, recomendadas por un conocido médico de Lewes, el doctor Richard Russell. El por entonces príncipe de Gales, Jorge IV visitó Brighton por primera vez en 1783, como recomendación de sus médicos, que pensaban que el agua de mar sería beneficiosa para su gota. Durante sus primeras visitas al pueblo en 1783 y 1784 el Príncipe de Gales se quedó en Grove House, una gran residencia construida en la parte norte de la Steine en la década anterior y alquilada por su tío, el duque de Cumberland, de George Wyndham. A finales de 1780, la construcción de las terrazas Georgianas ya había empezado y el pequeño pueblo pesquero se convertía poco a poco en el cotizado centro turístico que es hoy en día. Durante la primera visita del rey Jorge IV, el regente se enamoró de la pequeña villa pesquera y alquiló una pequeña granja en la zona de Old Steine, cercana al paseo. Apartado de la Corte Real de Londres, el pabellón era a la vez un sitio discreto en el que el príncipe podía tener relaciones con su primera mujer, María Ana Fitzherbert, con la que se había casado en un matrimonio ilícito, ya que era católica. Decidido a mejorar la granja, el Príncipe de Gales contrató los servicios del arquitecto Henry Holland para transformar la en una nueva villa que sería conocida como Marine Pavilion. Conocido inicialmente como Brighton House, el "Pabellón Marino" era una clásica villa de dos plantas en forma de una letra "E", con entramado de madera y con fachada de azulejos matemáticos de color crema. Un salón abovedado con seis columnas iónicas se sitúa en el centro con las alas inclinadas a ambos lados, mientras que un pórtico jónico proporcionó la entrada en el lado occidental. La decoración era de un brillante estilo francés. Con su mencionada pasión por el arte y la fascinación por Oriente, amuebló y decoró ricamente la casa, escogiendo especialmente objetos y muebles importados de China, e hizo empapelar las paredes con papel pintado a mano, adquiriendo finalmente el pabellón por 17 000 libras en septiembre de 1807. Pero su transformación en un opulento palacio comenzó recién en 1815 y tardó siete años en completarse. El príncipe Jorge escogió para la ampliación del palacio al arquitecto John Nash, cuya propuesta seguía el estilo oriental en el que se habían construido las caballerizas. Nash estaba inspirado también en el paisajista Humphrey Repton, que había publicado diseños para un nuevo palacio basados en las formas arquitectónicas indias. Las obras comenzaron haciendo alteraciones de la fachada central occidental, seguidas de la construcción de la Gran Cocina y los dos nuevos salones: el Salón de Música y el Salón de Banquetes. Los trabajos en todo el edificio, estructura y decoración interior terminaron en 1823. La compleja composición de las cúpulas, torres y minaretes crea un exterior romántico. A cada lado del enorme domo central hay dos torres que dan servicio a las habitaciones interiores sobre el Salón, una mediante una escalera y la otra con una grúa. Para conseguir un efecto pintoresco, las paredes interiores fueron pintadas de forma que parezca un edificio hecho de piedra de Bath. En 1817 el príncipe contrato a Frederick Crace y Robert Jones para terminar de decorar el interior, combinando una rica y sofisticada decoración con la altísima calidad del mobiliario, creando así un lujoso palacio. Cuando la reina Victoria accedió el trono, hizo una visita al Royal Pavilion en 1837, no le gusto su estilo y la ofreció en venta, siendo adquirida por la ciudad a 53 000 libras. Utilizado como hospital en la I Guerra Mundial, sus interiores resultaron dañados, por lo que el gobierno decidió en 1920 renovarlo completamente, Así, tras un largo periodo de restauración que abarcaron décadas, hoy el Pavilion está abierto a las visitas y disponible para eventos educativos, banquetes y bodas, como un testimonio de la prosperidad de Brighton, ciudad a la que está inextricablemente vinculado.

viernes, 28 de febrero de 2025

ANCIENT SUDAN/ ENDURING HERITAGE: El legado perdurable de una antigua civilización

Como sabéis, uno de los objetos más famosos del Museo Británico es una cabeza de bronce del emperador romano Augusto gracias a su delicado modelado y a los ojos incrustados que aún se conservan. Lo que es menos conocido es que fue descubierta en 1910 en el yacimiento subsahariano de una antigua ciudad en la orilla oriental del Nilo, a unos 240 kilómetros al norte de Jartum, en el actual Sudán, enterrada bajo las escaleras de un templo. ¿Qué hacía allí? He aquí una teoría: era un botín de guerra del reino de Kush, que - como registró el escritor griego Estrabón - se resistió al dominio romano. Situado en una encrucijada entre África Central y el Mediterráneo, era un nexo de personas, culturas e ideas. El Reino de Kush fue en su apogeo uno de los mayores imperios del mundo antiguo, gobernando desde el Nilo Azul hasta el Levante. En efecto, los kushitas - que, durante la XXV dinastía (que duró casi un siglo, desde el 744 a. C.), también habían reinado como faraones sobre sus antiguos colonizadores egipcios, al norte - son el tema de una nueva exposición itinerante, compacta pero fascinante, organizada por el Museo Británico en el Museo y Galería de Arte de Portsmouth, titulada Ancient Sudan: enduring heritage (Antiguo Sudan; Un legado perdurable) que desde el pasado 1 de Febrero está abierta al público y que podrá ser visitada hasta el 9 Noviembre del 2025. Comisariada por Loretta Kilroe, una joven egiptóloga con un entusiasmo imparable por todo lo relacionado con el reino Kush, la exposición (en realidad, una exhibición) contiene solo nueve artefactos prestados por el British Museum, junto con varios artículos fascinantes (incluido un resplandeciente "thoob" escarlata, o vestido de novia tradicional sudanés, reluciente con bordados y cuentas) proporcionados por miembros de la comunidad sudanesa de Portsmouth, que cuenta con varios cientos de personas. Lamentablemente, la cabeza de Augusto no se encuentra entre las piezas en exhibición, que es de una escala más modesta e incluyen cinco vasijas decoradas (una especialidad kushita). Asimismo, dos cocodrilos de aspecto sorprendentemente feliz, con garras pero sin dientes, aparecen en el hombro de una jarra bulbosa descubierta en un cementerio de la ciudad nubia de Faras (hoy inundada por el lago Nasser). Una jarra anterior, con un alegre diseño cruciforme, probablemente era un símbolo de estatus importado de Egipto, imitando las vasijas romanas. Para el ojo inexperto, la cultura visual del reino kushita puede parecer directamente egipcia, como lo ejemplifica una pieza destacada: un mascarón de bronce de una barca ceremonial (es decir, un pequeño barco que se transportaba ritualmente por tierra) que probablemente representa a la diosa Isis. Es posible que se haya producido durante el siglo III a. C. para un rey kushita que se autodenominaba “amado de Isis”. La popularidad de la deidad femenina nos alerta sobre el hecho de que las mujeres kushitas podían alcanzar posiciones de poder. El imperio era matrilineal e incluso es posible que quien rechazó a los romanos fuera una mujer (una reina guerrera tuerta, si hemos de creer a Estrabón). En un paso en falso, el programa evita la Dinastía 25 (quizás porque, para los especialistas, el período es demasiado obvio), pero el enfoque en el “Kush profundo”, como lo expresa Kilroe, es fresco. Ancient Sudan: enduring heritage puede ser un ejemplo de realización de exposiciones de bajo costo, que dependen de la buena voluntad entre las instituciones y el público local; además, en la segunda de sus salas, una encantadora y antigua exhibición de pájaros disecados, extraídos de la colección de Portsmouth, representa a las especies encontradas en Sudán. Sin embargo, en sus propios términos, la exhibición puede considerase un éxito, ya que nos recuerda la asombrosa herencia de una parte de África hoy asolada por una interminable guerra civil, y de lo que hoy en Occidente conocemos poco.
actualidad cultural
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...